El estado del bienestar es una cosa que teníamos que nos
cubría las espaldas. Una pléyade de servicios, subvenciones, ayudas, subsidios,
etc… que nos garantizaban que, pasara lo que pasara, hasta cierto punto,
podíamos estar tranquilos acerca de nuestro futuro.
Desde luego no era gratis, como es lógico el dinero para
mantener la maquinaria de la “tranquilidad” salía de nuestros impuestos. Se
pagaba la sanidad, la educación de los hijos, los subsidios de desempleo, las
pensiones, en fin, cositas que conformaban la red de seguridad de nuestra
sociedad.
Sin embargo, de un tiempo a esta parte, cada vez más países
reconocen que el estado del bienestar es insostenible, cosa que comprendo
perfectamente pues cada vez son mayores las poblaciones que conforman los
países mientras que, paralelamente, los aumentos en la productividad hacen que
la mano de obra necesaria descienda y, con ella, la recaudación fiscal.
Como digo, es lógico que no se tenga algo que no se puede
mantener, lo que me molesta, lo que me indigna es que me hagan pagar por algo
que no me proporcionan. Señores políticos, y digo señores políticos por no
decir malditos cerdos sin alma, me parece vergonzoso, horrible, asqueroso y
muchas cosas más, que nos desangren con los impuestos que nos desangran, que
son los más altos de la historia, y, a la vez, obliguen a enfermos de cáncer,
hepatitis, etc… a pagar parte de sus tratamientos.
Es una atrocidad que digan que se rebaje el presupuesto de
sanidad en más de un 30% mientras que las subvenciones a partidos aumentan casi
en la misma cuantía. Y lo peor de todo, es que la culpa no es suya, es nuestra
que no somos capaces de salir a la calle con antorchas a quemar al monstruo de
Frankenstein que nos asfixia a nosotros y a las generaciones venideras.
Lo peor de que nos desangren es que además lo hace tomándonos por tontos. Cuando propuesieron el copago farmacéutico, lo argumentaron diciendo que pretendían evitar el abuso en las farmacias. Ahora, por lo visto, estamos abusando de tener hepatitis, cáncer, VIH y otras enfermedades a largo plazo por la sola razón de que los tratamientos son "gratis". Qué vergüenza.
ResponderEliminarEstán intentando mantener el estado de bienestar, pero sólo para unos pocos, entre los que, por supuesto, no estamos los ciudadanos que lo pagamos.
http://maria-may.blogspot.com.es/
Pero en los tiempos de las maravillosas “infraestructuras”, cuando se hacían cada día kilómetros y kilómetros de autopistas, circunvalaciones, radiales y vías de AVE, no oía yo a nadie quejarse, y he tenido que oír lindezas de todo tipo cuando yo me quejaba. Ahora, que los adjudicantes y adjudicatarios de esas obras tan “necesarias” para utilizarlas ellos mismos y sus secuaces empresariales se han llevado las comisiones a Suiza, y una vez terminado el chollo “infraestructural”, tienen que buscarse otras fuentes de ingresos, no vaya a ser que caigan en el anatema economicista del no crecer o del decrecer. ¡Qué vergüenza, eso no se puede consentir! Y les da lo mismo que sean hospitales que escuelas, el caso es seguir creciendo, cada uno en lo suyo.
ResponderEliminarLas administraciones burocráticas han crecido enormemente en Europa. Ello conlleva sostener monstruos que bajo la excusa del bienestar engullen recursos sin cesar. Como hay que competir con países cuya estructura de gasto administrativo aún no está en esa fase de monstruo, es muy difícil hacerlo.
ResponderEliminarNo hace mucho existía la guerra fría, que hacía que China y Rusia, así como los países que formaban parte de su imperio, estuvieran prácticamente fuera del mercado de bienes de consumo. Tal como sigue hoy Corea del Norte, por ejemplo. Pero la caída del imperio del llamado socialismo real o comunismo, alteró profundamente las reglas de juego. Y Occidente no estaba preparado para ello. De hecho, no se esperaba una caída de los imperios comunistas tan rápido.
China, convertida en una dictadura comunista que practica el capitalismo salvaje ha arrasado sectores industriales completos en Occidente. Manu militari y como si fuera un enorme hormiguero, ha ido laminando esos sectores paso a paso: textil, papel, zapatos, etc...
Los monstruos de gasto administrativo occidentales y sobre todo en la UE, no pudieron resistir esa competencia desleal de un enjambre de 1.300 millones de personas laborando como abejas bajo una dictadura implacable que cambió la amenaza de los misiles por la destrucción de las fábricas de los "enemigos".
La UE fue un invento que surgió durante la guerra fría. Y cuando de verdad empezó a funcionar, sobre todo con el BCE y después una parte de la UE en el Euro, resulta que el mundo había cambiado: ya no había guerra fría o ésta había mutado al campo comercial. Nos pilló al traspiés. En fin, no me enrollo más.
Con todo esto de la crisis estamos viendo la cantidad indecente de dinero que ha ido a parar de mafiosos y mangantes )y siempre con políticos mezclados en el ajo)... dinero que debe seguir ahí, solo para unos cuantos.
ResponderEliminarY lo triste es que ahí siguen los políticos... da igual imputaciones, acusaciones o investigaciones (¿10 años investigando lo de fabra y aún no hay juicio?), les siguen votando, estando ahí, cuando uno se ve un poco con el agua al cuello dimite y pone a dedo a un amigo/a, los partidos políticos de todos los signos corruptos, sindicatos, pequeños zonas rurales endeudas como si fueran grandes urbes, grandes urbes endeudadas como si fueran países... pero ahí les sigues viendo, en su sillón repleto de privilegios.
Siempre he sido partidario de las buenas formas, pero me temo que realmente hemos llegado a un punto en el que la única solución para que los políticos se decidan a trabajar honrada y eficazmente con nuestros impuestos es esta: "salir a la calle con antorchas a quemar al monstruo de Frankenstein que nos asfixia a nosotros y a las generaciones venideras".
1deCáceres
Tengo el convencimiento de que eso es precisamente lo que buscan los que se han llevado la pasta con ayuda de sus repugnantes representantes. Que comience la violencia, porque saben perfectamente que en el segundo dos la aplicaríamos entre nosotros, como buenos forofos adiestrados durante décadas, y nos mataríamos mutuamente, sin tener que hacerlo ellos. Después, a reconstruir y a seguir forrándose, que aún les parece poco lo que han amasado.
EliminarAsí que me parecería mejor método ignorarles de pensamiento, palabra y obra. A los titiriteros y a sus títeres. Si cortamos los cordones umbilicales, se mueren de inanición. Ya pueden hacer malabares, que si dejamos de ser audiencia de sus medios de comunicación, votantes de sus estafadoras urnas y consumidores compulsivos de todos sus ridículos cebos, están muertos y desaparecidos. Que me digan cómo pueden obligar a nadie a esas tres cosas si un día nos da por pensar por cuenta propia y no por cuenta ajena.
Cierto fractalio, eso sería lo ideal... pensamiento autonómo y se acabó alimentar a estas sanguijuelas.
ResponderEliminarPero llevamos "tropecientos" años de crisis, y a mí me da la sensación (a lo mejor es cosa mía) que su cortijo (el de políticos y directivos de grandes empresas) es cada vez más grande y con más privilegios mientras los de la plebe somos cada vez más pequeñitos.
1deCáceres
Efectivamente, tienes razón. Porque parece ser que no queremos desconectar las tres vías.
EliminarLamentablemente la democracia no es tal y con dos ejemplos vereis que la realidad social es otra:
Eliminar1-cuando la gente sale a la calle a pedir p.ej. que no se vaya a la guerra con Irak, el gobierno lo desoye. Cuando se hacen manifestaciones contra el sistema educativo idem de lo mismo.
O sea, que el pueblo es mayoria pero el gobierno las desoye.
2-Cuando en un partido politico hay que tener obediencia de partido ¿donde esta la opinion democratica? El ejemplo esta en todos los partidos.
Muchas veces me pregunto se nadie discrepa y no hay opiniones diversas.....
" estado del bienestar es insostenible, cosa que comprendo perfectamente pues cada vez son mayores las poblaciones que conforman los países mientras que, paralelamente, los aumentos en la productividad hacen que la mano de obra necesaria descienda y, con ella, la recaudación fiscal"
ResponderEliminarQue aumente la productividad no debería ser problema, el problema es que no descienda las horas de trabajo por trabajador. Es decir importa bien poco que se necesite la mitad del trabajo humano para producir, mientras se reduzca el trabajo en la mitad para los trabajadores.
Menos paro que pagar, más flujos en la economia y mejor funcionará la oferta-demanda para marcar precios (y menos estancado estará el dinero) si tenemos pleno empleo en comparación al "medio-empleo" (50% trabajando)
Y la mayor población por ahora ni antes ha sido un problema, la productividad ha subido mucho más que la población. Y en el futuro en menos de 4 decadas la población se estancara cerca de los 9mil millones (informes ONU sobre población), y bien seguro que se estanca antes.