De vez en cuando, me gusta olvidarme de todo lo que me
cuenta, de los discursos repetitivos de políticos y economistas de renombre y
de las impactantes proclamas de los periódicos de economía para echar una
mirada al horizonte en busca de respuestas.
Y lo que veo me asusta. Me explico.
A la hora de invertir, lo hago tanto en mercados bursátiles
como en mercados de materias primas, muchos diréis que son un casino, pero cada
uno pierde su dinero como quiere. Lo que vengo notando de un tiempo a esta
parte es que se está produciendo un descenso generalizado en los precios de
éstas (oro aparte, que esa es otra historia bien diferente).
Las materias primas más industriales han iniciado una caída
que no hace presagiar nada bueno. Las materias primas caen porque su demanda
cae, una verdad de Perogrullo, pensaréis, sí, lo es, pero hay que extraer una
lectura aparte: si la demanda cae, es porque su uso futuro también se espera
que caiga.
El ejemplo más importante lo tenéis en la caída del precio
del cobre, una de las materias primas más industriales que existen. Si os fijáis
en el gráfico, el precio del cobre se ha ido ajustando al del SP500 (las 500
compañías más importantes de USA) debido al peso que las compañías manufactureras tienen en este índice, sin embargo, de un tiempo a esta parte ese
ajuste no se produce. Vamos que es como
si os digo que una empresa de ferrocarriles a vapor muestra que ya no está
comprando carbón… raro, ¿verdad?
Por si fuera poco, tenemos unos datos de PMI manufacturero
bastante preocupantes. Este indicador mide las compras que el sector
manufacturero realiza. Debido a la importancia del sector de la fabricación en
las economías, este índice se usa como termómetro económico.
Como podréis ver en el gráfico adjunto, este índice no para
de estrellarse. ¿Qué podemos deducir?
Desde mi punto de vista, la economía, digan lo que digan las
bolsas, que esas juegan en la liga de la liquidez infinita, se nos está
mostrando un escenario económico en el que no se compran materias primas porque
no se espera producir. Supongo que no se espera producir, porque no se espera
consumo y os recuerdo que una cosa es el consumo estúpido e irracional y otra
el consumo de subsistencia. Y, lo que no se espera, es CONSUMO.
Vamos que lo que estoy viendo, es que lejos de arreglarse la
crisis, lo que está por llegar es el tortazo definitivo.
En palabras simples: he mirado al abismo y me he asustado.
La verdad, no lo veo claro. Corremos el riesgo de pensar que porque la zona Euro está de capa caída aplastada por los impuestos, pasa lo mismo en todo el mundo. Los BRICS están a toda pastilla (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), entre otros. Queman carbón a punta pala, de lo que tienen abundante mientras aquí en la UE somos ecologistas y nos comen las musarañas. (Los parados deben consolarse pensando que se sacrifican por esa supuesta ecología).
ResponderEliminarEl cobre subió mucho de precio desde 2001 hasta 2012, un 340%, mientras que el aluminio, un metal rey que se consume para todo, en ese periodo, sólo subió un 30%. O sea, que ahí deben intervenir muchos factores como la producción de las minas, las compras en Bolsa de certificados sobre ese metal, la demanda del mismo, su sustitución que irá a más por otros productos, etc.
He tratado algo el tema en un artículo sobre el precio del oro y otros metales. Lo dejo de enlace en mi nick.
Magnífico artículo Bucan, tomo nota.
EliminarAdemás de Aluminio y Cobre (Plomo aparte) existe algún metal clave en la industria?
Tenemos algún ranking de los metales más usados en industria (con o sin %)???
GRACIAS!
No sé, insignificantius, sinceramente no lo he entendido. Yo soy historiador, no economista, necesitaría que redondeases un poco más la explicación para ver por donde van los tiros de ese abismo que predices.
ResponderEliminarImagina que tienes una fábrica y que para fabricar tu producto usas dos elementos. ¿Si dejas de comprar esos dos elementos por qué será? Porque o tienes mucho almacenado o porque piensas fabricar menos. Y en el segundo supuesto, será porque piensas que se va a vender menos.
EliminarSi se confirma tu sospecha, puede que incluso acabes cerrando la fábrica.
Eso es, más o menos, lo que intento explicar.
Perdón si lo he hecho muy enrevesado...
Cuanto antes se mira alrededor, antes se percata uno de la realidad. El abismo estaba ya ahí, no se ha creado ahora. Llevamos muchísimos años produciendo en exceso, y era de cajón que llegaría el momento en el que colapsaría. Ese momento se produjo hará unos treinta o cuarenta años. Mientras, se ha ido mareando la perdiz y huyendo por delante, con redistribuciones geográficas artificiales y especuladoras, y con la creación de estafas piramidales que han terminado de rematar el asunto. Otra cosa es que no hayamos querido verlo, y que sigamos sin querer verlo.
ResponderEliminarEn cuanto al casino de la bolsa, por supuesto que cada uno pierde su dinero como quiere, pero no por eso deja de ser un casino. Hay mucha gente que vive del juego. Y en la bolsa, no creo que seas tú de los que pierdan.
El tema es Fractalio, que como dices, hace 40 años que el abismo está a la vuelta de la esquina.
EliminarAún sabiéndolo, la cuestión es ver cuándo es inminente porque, mientras tanto, es más cómodo remar a favor de la corriente.
Yo, al igual que tu, parto de que esto tiene que reventar, la cuestión es cuándo.
Pd: cierto, no pierdo en la bolsa, pero porque no la considero en un casino tras años de pruebas y decenas (más de 50 o 60) libros leídos al respecto.
Saludos
Creo que realmente lo que evidencia es que si esas materias primas básicas están descendiendo, se tiene que dar por hecho que nadie tiene pensamientos de que el asunto remonte a corte plazo y por lo tanto, es absurdo comprar y/o invertir en determinadas materias. Otra pista más del agujero negro en el que nos hundimos.
ResponderEliminarAhí le has dado, aunque tu lo has resumido mejor que yo jajajaja
EliminarBuen fin de semana!