Europa a examen en Grecia

Grecia encara este fin de semana elecciones generales, otra vez. Muchos ven estas elecciones como un referéndum a la permanencia del país heleno en Europa, cosa a la que me sumo.
 
Ante la incertidumbre los griegos se atrincheran como les fuera la vida en ello. El dinero está saliendo a espuertas de los bancos y se dice que las familias están acumulando agua y comida en sus despensas. El miedo campa a sus anchas por “as polis”y, la verdad, no se les puede culpar.
 
Durante años, Grecia vivía en un dulcísimo sueño de jubilaciones tempranas, corrupción elevadísima y una casta funcionarial desbordada. Con la crisis, el intento de seguir con el mismo estilo de vida ha terminado endeudando a sus ciudadanos y bancos hasta extremos insospechados. Si pensáis que España paga la deuda cara (7%) habéis de saber que Grecia paga los bonos a 10 años al 22%.
 
Al final, la situación se hizo insostenible y hubo que rescatarlos varias veces so pena de caer en bancarrota y, de paso, llevarse al euro consigo. El problema es que lo que se rescató no fue a Grecia, no fue a los griegos, se rescató a los bancos franceses y alemanes que eran los que tenían la deuda griega.
 
Los huracanes de dinero se los sucesivos rescates atravesaban Grecia dejando allí una simple brisa, mientras que el resto del oxígeno volvía a salir del país. Sin embargo, la factura de las bombonas de oxígeno sí la están pagando los griegos, aunque ellos son los que menos respiran. Este es el motivo por el que se plantean si quieren seguir así.
 
En función de los resultados electorales podemos contemplar varios escenarios.
 
Ganan los partidos que abogan por permanecer en Europa y restucturar la deuda.
 
Posible nueva quita, posibles nuevos rescates, los griegos cada vez más pobres y el país cada vez más endeudado. Pensad que si a un país al que se le exige austeridad extrema y que, además, crezca para hacer frente a una deuda creciente, es probable que uno del os objetivos se imponga y diluya al otro. Vamos, que no se puede pedir que aprendas a nadar sin meterte en el agua.
 
Ganan los partidos que abogan por mandar a Aleman… perdón, Europa a la mier… cuneta.
 
Aquí es cuando se puede liar. Grecia fuera del Euro, el euro, al principio se podría depreciar por que un país (por primera vez) haya salido del eurosistema para luego aumentar de valor por haber eliminado el lastre del país heleno. El NeoDracma, sufriría una devaluación instantánea que, algunos, cifran en un 60%. Probable cierre de fronteras de Grecia (al salir del espacio Schengen). Tras suspender pagos, Grecia podría convertirse en la Argentina europea y ciertos bancos alemanes, franceses y alguno español, lo pasarían bastante mal.
 
Vamos que, sea como sea, a la larga es “susto o muerte”. Y es que el problema no es qué pieza del motor falla, el problema es que el motor entero ha de ser cambiado.
 
Esta crisis es mundial y sistémica, es decir, del sistema. Hay que cambiarlo todo y, cuanto más se tarde en hacerlo, peor.
 
Pd: al menos España ganó ayer, a ver si, para variar, los futbolistas tributan sus primas en España (en el mundial lo hicieron en Sudáfrica y en la otra Eurocopa en Austria para ahorrar impuestos) y colaboran un poquito con la gente que les anima… panda de millonarios insolidarios, piden que les animemos, pero luego… en fin, paso que me cabreo y es viernes…