Hace poco más de ocho siglos vivía en las tierras fermosas del Reino de Castilla un labriego llamado Sancho García de Espinosa, natural del pueblo del mismo nombre.
Sancho era un buen siervo, pagaba una renta a su señor que a cambio le protegía de los saqueadores que pululaban por las tierras de Castilla. Además, como buen católico (so pena de ser plato principal en una barbacoa si no lo era) pagaba un diezmo de su exigua cosecha a la iglesia.
El buen labriego, vivía resignado sabiendo que no era dueño de su propio destino, tampoco sabía que había más allá de su pueblo, pues las noticias las daban en la iglesia y siempre eran locales.
Había años mejores y otros peores. Años de cosecha buena, en los que se podía comprar unos zapatos, y años de carestía, en los que el señor subía la renta para seguir recaudando lo mismo. Años en que el señor era justo y otros en los que subía los impuestos para poder comprar más joyas a su esposa o tunear su montura.
Sancho no se quejaba, soportó con estoicismo todos los tormentos que la vida o el señor le enviaron. Tampoco habría servido de nada quejarse, la corte real estaba muy lejos y cada señor disponía de la vida de sus siervos a su antojo. Incluso cuando su amo ejerció el derecho de pernada cuando su hija se casó, el labriego tuvo que agachar la cabeza y tragarse su tristeza, del mismo modo que cuando el señor mató a palos a Lope, su vecino, un crimen por el que el amo nunca sería juzgado. Sancho vivía como podía la época que le había tocado, al fin y al cabo, eso era el feudalismo.
Andrés nació en Castilla y León en los años 70, pertenecía a la Generación de la Constitución. Durante años, estudió para conseguir una vida mejor, su padre le había inculcado la cultura del esfuerzo.
En cuanto empezó a trabajar, comenzó a pagar impuestos. A golpes, aprendió lo que era el IRPF y el IVA. Un 20% del primero y entre un 8% y un 18% del segundo. Pagaba por trabajar y, con lo que le quedaba, pagaba por lo poco que podía comprar. Lo hacía resignado bajo la amenaza de una multa de la Hacienda.
Para Andrés había años mejores y otros peores. Durante un tiempo hubo un boom inmobiliario que le permitió tener la ilusión de una falsa prosperidad. Durante esa época, se compró su primer coche y se independizó de la casa familiar. Sin embargo, esa época pasó.
Los políticos de su comunidad, que fueron los únicos que no se enteraron de que la bonanza había pasado, siguieron incrementando los impuestos para mantener el nivel de recaudación (que había disminuído por la crisis).
Andrés nunca se quejaba, a pesar de ver cómo los dirigentes cometían crímenes y salían impunes de los juzgados. Al fin y al cabo, ellos tenían al poder. Además, si el tema era grave, siempre podían inventarse un enemigo propiciatorio (funcionarios, parados, autónomos, etc…) o facilitar espectáculos masivos para tener entretenidas a las masas.
En cualquier caso, gracias a las subvenciones a los medios de comunicación, era difícil que la información veraz llegara a la gente. Andrés vivía como podía la época que le había tocado, al fin y al cabo, eso era el neofeudalismo.
¿De verdad ha cambiado tanto la cosa?
¿Qué creéis que pasó cuando el derecho de pernada se instauró de nuevo?, ¿protestó Andrés o se resignó como siempre?
Vosotr@s escribís el final de la historia…
Pd: también en ambos casos el poder se perpetúa en dinastías
Magnífico cuento y ejemplo.
ResponderEliminarYo veo dos posibles finales. Uno netamente hispano/almodóvar, y otro made in hollywood.
Cúal preferís?
Lo malo es que no es un cuento...
EliminarPd: en la de Almokdovar segguro que hay travestis de la guera civil...
jajaja. NO de la guerra civil, pero si, pensaba que la hija de andrés, en realidad era hijo.
EliminarHabría un idilio medio forzado entre el alcalde y el hijo/hija de andrés, jajaja
Lo triste es, que como pones en tu PD, el poder se perpetúa en dinastías.
ResponderEliminarEs triste, muy triste, pensar que los gobernantes que tenemos, sólo están ahi, porque sus antepasados fueron más brutos, más sanguinarios, menos escrupulosos, o para nuestra desgracia, más astutos que los contrarios, porque no creo que miraran por nuestro bien, ni entonces, ni ahora...
¿Quien hace esclavos a sus hermanos?
Ya ves... Los padres de la mayoria de los democratas actuales de todos lo colores eran franquistas convencidos
ResponderEliminarLa democracia actual en España fue en realidad volver al pasado del caciquismo regional y local. Los partidos políticos se han convertido en un reducto de caciques.
ResponderEliminarLos caciques se hicieron dueños de las Cajas y las manosearon a su antojo. Y aún no han sacado sus garras de ellas del todo.
España tiene una revolución pendiente: la lucha contra el caciquismo, o sea, contra la corrupción.
La democracia actual en España fue en realidad volver al pasado del caciquismo regional y local. Los partidos políticos se han convertido en un reducto de caciques.
ResponderEliminarLos caciques se hicieron dueños de las Cajas y las manosearon a su antojo. Y aún no han sacado sus garras de ellas del todo.
España tiene una revolución pendiente: la lucha contra el caciquismo, o sea, contra la corrupción. Pero, ¿van a dejar los partidos políticos que se les meta mano a sus caciques si esos caciques son los dueños de los partidos?.
(Creo que se me pasó el mensaje. Borra el anterior, por favor).
Hola
EliminarEstoy de acuerdo contigo.
Y no, no van a dejar que se haga
No, no dejarán que se haga, pero tampoco deberíamos preguntales...
EliminarDe acuerdo.
EliminarHay cosas que no se deben preguntar
Estimado amigo...no me digas que ahora te has convertido al comunismo...ya sabes que el gran paradigma es que para que haya ricos tiene que haber pobres. No solo en la epoca feudal, recuerda que en el An-Andalus estaba permitida la esclavitud, en la famosa edad de oro de este pais y su imperio donde nunca se ponia el Sol, o eras quemado por la hoguera o morias con los tercios de Flandes por un mendrugo de pan porque no llegaban las "soldadas", o que decir de la famosa revolucion industrial del telar de lanzadera, o del mayor desarrollo y esplender patrio bajo la dictadura de Primo de Rivera, donde cientos de miles de españolitos malvivian de las peonadas de construir carreteras, o por ultimo en los tiempos de otro dictador, donde la clase media podia llevar a los hijos a las escuelas gracias al pluriempleo.
ResponderEliminarCon esto quiero decir, que aun estado de acuerdo en tu plenateamiento siempre ha sido asi.
Como veo que ahora hay mucha gente que no te lee, sera por las vacaciones y el veranillo, me gustaria discutir contigo algo que en una entrada pasada tuya se comento.
En efecto, no tengo pruebas, pero se de muy buena tinta por un par de conocidos rotarios, que desde el año 2003, tras la famosa "cagada" del BoA tras el atentado a las torres gemelas, habia una especie de "renque, renque o come come" entre las clases adineradas, porque gracias a la ingente cantidad de credito en circulacion, podias encontrar el Sabado por la noche cenando en el mismo restaurante y con el mismo coche en la puerta al carnicero de tu barrio, y eso...no estaba muy bien visto.
LOPECHESS...dixit
Jajajajajajajajajajajajajajaja!
EliminarJajajajajajajajajajajajajajaja!
Como se nota que aún no te has ido de vacaciones
Jajajajajajajajajajajajajajaja!
Jajajajajajajajajajajajajajaja!
La verdad es que, al final, salvando las diferencias todo sigue igual o peor, ya lo decían los chinos "nada nuevo bajo el sol"
Es cierto que para muchos "nosecomollamarlos" lo único mejor que tener mucho dinero es que el de al lado no tenga nada... y claro, las comparaciones son odiosas...
Este cuento es más falso que un duro de palo.
ResponderEliminarLas falsedades más gordas:
Los señores feudales no podían cobrar una cantidad arbitraria, y subirla según querían. Eso es de las pelis de la edad media. Los siervos tenían la obligación de trabajar un día de cada siete en las tierras de su señor, o en las faenas que para su señor fueran de menester. A cambio, tenían cobijo, protección contra bandidos, y lo que necesitaren para su oficio (tierras de labranza, molino) que podían explotar, disfrutando los beneficios de la cesión y pagando un diezmo (10%) por la cesión. Eso supone un tipo impositivo del 36% sumando iglesia y señor feudal, frente al casi 50% que tenemos hoy en día si sumamos todos los impuestos directos e indirectos.
El derecho de pernada cualquier historidador especializado en la edad media reconoce que es un mito creado por la literatura del renacimiento, y potenciado la literatura de la reforma.
Los nobles no eran inviolables. Tenían que responder ante el rey de una serie de delitos. Fuera de sus tierras, respondían de cualquier acto delictivo. A un ciudadano de un burgo, o de otro señor, no le podían tocar ni un pelo. Los derechos de vida y propiedad privada, tenían que respetarlos. No existía nada parecido a una "doctrina Botín", ni una "doctrina los albertos".
Finalmente, cuando había una incursión de piratas, ladrones o una guerra, el señor feudal se ponía su armadura, e iba al frente a luchar. El primero. Muchísimos señores feudales murieron a lo largo de toda la edad media en primera linea de frente, defendiendo a sus siervos. Yo tengo mis problemas por ver a la Trotona de Pontevedra o al Iluminado de León con un CETME en primera línea de batalla defendiendo España. O entrando en las 3000 viviendas, encabezando la policía.
Resumiendo: es completamente falso que estemos tendiendo en derechos respecto al estado a la edad media. Las cosas están empeorando, no mejorando.
Agradezco tus correciones, me gusta la historia pero no soy historiador.
EliminarAl final este cuento pretende ilustrar el hecho de que creemos que vamos a mejor y, sin embargo, nada cambia.
O, como tu dices, vamos a peor...
Saludos